Maluma le cantó a sus “babys” y a sus “mamis”; provocó un delirio en La Pedrera
El joven artista colombiano ofreció en Villa Mercedes un recital delirante que duró casi dos horas. El despliegue internacional fue la distinción de su presentación histórica en San Luis que se coronó con el carisma de la gente centroamericana. Hizo cantar a un estadio de fútbol que se ocupó un poco más de la mitad.
Maluma no solo tiene la corona tatuada en su cuello. La noche del sábado en La Pedrera demostró que está sentado en el trono y que su éxito recién comienza. Su mirada sexy y su baile despertaron el deliro de miles de mujeres que se olvidaron del frío y que se movieron con el calor de sus canciones.
Horas antes del show, Maluma estuvo en San Juan para dar el puntapié inicial al partido entre Boca y River. Allí se subió a un avión privado que lo trajo a San Luis y su espectáculo en la ciudad de la Calle Angosta comenzó en los tiempos establecidos. Si bien hasta anoche no se conocían cifras oficiales, el público ocupó más de la mitad del estadio.
“Borró cassette” y “Sin contrato” fueron las canciones iniciales que despertaron los primeros gritos ensordecedores. Así fue abriendo el camino de los éxitos que lo hicieron conocido en el mundo y por los cuales tiene millones de seguidores.
El artista subió al escenario diez minutos antes de las 22, con un buzo negro que promociona su gira mundial, un jeans del mismo tono, anteojos de sol y peinado con colita. Quebró las caderas y jugó con sus miradas de seductor que se mostraron en primer plano por las pantallas gigantes que se ubicaron a los costados del imponente escenario.
Les habló toda la noche a sus “babys” y a sus “mamis”, “las provocó” para que les subiera la temperatura y se les “desatara el fuego en la cintura”; les pidió que levantaran las manos sin miedo y las bendijo varias veces. Inclusive les regaló, en algunos casos, dos versiones de una misma canción. Se mostró sorprendido por el recibimiento y estuvo siempre cerca del público. Cada sonrisa volvió a enamorar a sus fanáticas.
Su repertorio lo continuó con “El perdedor” y otras tres canciones que lo pusieron en la vidriera más grande de la música internacional: “Desde esa noche”, la que interpretó con Thalía; “Vente pa’ ca”, con Ricky Martin y “Chantaje”, con Shakira.
También hizo “La bicicleta”, de Carlos Vives y Shakira, para que lo vean cómo se siente orgulloso de los ritmos colombianos y de la tierra que lo vio nacer. Después siguieron “Me llamas” y “La temperatura”, para seguir calentando el ambiente.
Maluma también se tomó unos minutos para contarle al público que en este viaje lo acompañó su familia, la que está integrada por sus padres y su hermana. Explicó la importancia que tienen en su carrera, los invitó a subir al escenario y les dedicó “Vuelo al olvido”. “Son mi inspiración, mi motor”, dijo. Pidió perdón porque esa canción la hace siempre con una chica que elige entre las fanáticas: “Sepan entender que hoy quiero hacerla con ellos, que están aquí acompañándome, y que son los que me ponen los pies en la tierra”.
Para el cierre dejó el que todos estaban ansiosos por bailar: “Felices los 4”, el éxito del momento. Lo cantó con la camiseta argentina puesta, un detalle que también despertó euforia en toda la cancha. Con “Cuatro babys” se despidió, a las 23:38, en medio un clima apasionante que muchos querrán volver a sentir.
La foto final será la que verán sus 28 millones de seguidores en instagram: él, su banda, sus bailarinas y el fondo oscuro iluminado por miles de teléfonos celulares.